Pongamos en valor a Clunia
Las ruinas de la ciudad romana de Clunia, en el municipio burgalés de Peñalba de Castro, son de un valor incalculable. Eso parece que no lo pone nadie en duda. Tiempo al tiempo, hay mucho ignorante suelto. Daré algunos datos puntuales, para aquellos que todavía los desconozcan o duden de mi afirmación, éstos no dejarán indiferente a nadie. Clunia Sulpicia, fue fundada en el siglo I a.C., fue capital de la provincia Tarraconense, llegó a ser habitada por 30000 habitantes y su teatro, que hizo también las veces de anfiteatro, podía albergar entre 8000 y 9000 espectadores siendo de los de mayor capacidad toda la Hispania romana. Para que se hagan una idea, el actual Polideportivo Municipal del Plantío tiene una capacidad de 2500.
Sus termas no se quedaban atrás y también eran de un tamaño mayor al de cualquier capital de provincia. Sus mosaicos, quizá de lo que más nos llame visualmente, monedas acuñadas, joyería o el propio foro de la ciudad también son magníficos. Pese a siglos de saqueos, voladuras y demás agravios, sigue atesorando ruinas riquísimas, y la mayoría sin escavar, sí han leído bien, la mayor parte del conjunto arqueológico está aún sin escavar. Se sabe que está ahí y poco más se puede hacer, por dos razones, porque no hay presupuesto para escavarlo y porque si se consiguiese no habría entonces para conservar lo descubierto. Esto ya pasa con los propios mosaicos, cada temporada se deben cubrir con telas y arena para evitar su deterioro en época invernal. O visitas Clunia en verano, o te quedas sin verlos.
El aula de interpretación de Clunia es moderna y más que digna y el trabajo de restauración arqueológica es encomiable con el justo, por escaso, presupuesto que se les asigna. Sin ir más lejos, los últimos Premios de Arquitectura de Castilla y León han premiado, en la categoría de ‘Restauración y rehabilitación’ a Darío Álvarez Álvarez, Miguel Ángel de la Iglesia y María José González Cubero por haber adaptado con éxito el Teatro Romano de Clunia para su uso en representaciones artísticas. Una magnífica noticia, sí, pero acompañada por otra no tan fantástica. Decíamos que no era boyante el presupuesto, pero es a costa de la Diputación Provincial, que hace un gran esfuerzo pero aún insuficiente. Y es que este año no llega ni para celebrar el Festival de Verano de Clunia, todo un éxito los últimos años, pero este año que precisamente se inauguró la finalización del plan de restauración, no hay festival.
Se nos llena la boca a los burgaleses, y más a los políticos burgaleses, con Atapuerca y sus restos arqueológicos, su Museo de la Evolución, etc. Se lo merece, son excelentes, pero eso no quita para que no nos olvidemos de otros tesoros que tenemos en nuestra provincia. Rescatemos Clunia de una vez por todas, pongámosla en valor en vez de menospreciarla y encima menoscabarla, tomemos como ejemplo la Villa Romana de La Olmeda en Palencia, recibe el triple de visitantes y sus mosaicos, bellísimos, están sanos y salvos bajo un conjunto no menos bello.
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